Desafortunadamente, muchas de estas situaciones fortuitas podrían impactar negativamente a una organización. Entre ellas encontramos los accidentes laborales.
Los accidentes laborales no están limitados a ambientes industriales de alto riesgo. Incluso las empresas dedicadas a la prestación de servicios comerciales, administrativos, o legales, pueden verse afectadas por descuidos, mal diseño de sus instalaciones, o poca planificación para prevenir accidentes laborales.
Para saber cómo prevenir accidentes laborales, hay que definir el concepto primero.
¿Qué son los accidentes laborales?
Muchos autores intentan definir los accidentes laborales como situaciones de riesgo inesperadas que suceden dentro de un ambiente de trabajo. Sin embargo, esta definición es demasiado amplia, lo cual impide determinar el momento y las causas precisas de estos eventos, así como diseñar reglamentos o protocolos para evitarlos. Por tanto, es mejor guiarse por las definiciones usadas por los organismos encargados de fiscalizar estos eventos.
En general, las definiciones usadas por las instituciones de todo el mundo son variaciones de principios objetivos observables, lo cual hace más fácil la creación de manuales de seguridad empresarial estandarizados.
Para efectos de este artículo, definiremos accidente laboral como un incidente no intencional que causa daño físico, y que puede ser identificado y aislado.
Esta definición permite un enfoque sistemático dirigido a prevenir el riesgo de ocurrencia de dichos eventos, y crear herramientas organizacionales para minimizar los efectos de los accidentes laborales.
¿Cuáles son las causas de los accidentes laborales?
Debido a la naturaleza imprevista y espontánea de los accidentes laborales, es imposible identificar todas sus causas. Sin embargo, hay categorías generales que se pueden mantener bajo control reduciendo la incidencia de dichas ocurrencias.
Causas situacionales
Por lo general, se suele tener un enfoque de responsabilidad individual a la hora de evaluar y prevenir accidentes laborales. Sin embargo, regular la conducta y sistema de valores de cada individuo es casi imposible. Por tanto, es mejor adoptar un enfoque situacional cuando se diseñan políticas preventivas.
Las causas situacionales van en dos direcciones. Los actos riesgosos y las condiciones riesgosas. Los actos riesgosos son comportamientos inadecuados dentro del área de trabajo. Estos pueden ir desde hacer bromas a otros empleados, hasta protocolos mal diseñados para el manejo de equipos y materiales. Aquí, la prevención de accidentes laborales se enfoca en el diseño de reglas de comportamiento específicas para cada área de trabajo.
Las condiciones riesgosas tienen que ver con deficiencias en el área de trabajo que deben ser resueltas desde el punto de vista ingenieril. Tanto la maquinaria como la infraestructura deben ser diseñadas para minimizar los riesgos de accidentes.
Causas secuenciales
Este enfoque permite identificar las causas primeras de los accidentes. Aquí entran definiciones como el efecto dominó, donde al menos cinco factores (ambiente social, error humano, hábitos no seguros, accidente, y lesión) entran en juego sin ser uno de ellos el causante directo. Dirigir nuestros esfuerzos hacia uno sólo de estos factores no sería efectivo si no se toma en cuenta la secuencia de eventos en su totalidad.
También hay enfoques secuenciales que ayudan a detectar las causas primeras de los accidentes. Por ejemplo, un empleado herido en un accidente con un equipo pudo haber tropezado con un cable de alimentación extendido sobre el piso de trabajo. Pero la razón de la localización de este cable puede ser la mala ubicación de los enchufes de corriente con respecto a la maquinaria. En este caso, un esfuerzo de reconfiguración del área de trabajo sería mucho más eficiente que la creación de reglas estrictas que hagan que los empleados estén pendientes de las superficies de trabajo.
Causas multifactoriales
Estos análisis para la detección de riesgo y prevención de accidentes laborales se basan en tres tipos de factores que interactúan y dan pie a eventos desafortunados. Los factores se encuentran en tres categorías: los decisores, la gerencia, y las precondiciones.
El modelo del queso suizo para la prevención de accidentes laborales es una teoría reciente donde se identifican los materiales, el equipo, el ambiente laboral y los participantes, y se les representa a través de láminas superpuestas. En estas láminas también se identifican las posibles oportunidades de incumplimiento o “agujeros” en cada capa. Los accidentes laborales ocurren cuando estos agujeros se alinean. Según esta visión, la mejor manera de prevenir accidentes laborales es agregar capas que interrumpan estos agujeros.
Causas sistémicas
Los enfoques sistémicos toman una mayor cantidad de factores como parte del sistema de gerencia, sobre todo aquellos que tienen que ver con la cultura organizacional. La inclusión de la necesidad de reconocer a la cultura como elemento relevante al evaluar el riesgo organizacional ha impulsado una nueva corriente en la filosofía de prevención de accidentes laborales.
Esta corriente se nutre del enfoque multifactorial, pero agrega que los sistemas de gerencia y el comportamiento humano también deben ser introducidos en la ecuación. El enfoque sistémico acepta las complejidades de la realidad y considera que las soluciones simplistas nunca solucionan los problemas de fondo.
La ocurrencia de un accidente expone fallas en el sistema que podrían colocar a la organización en riesgo. Por ejemplo, el incumplimiento de los protocolos de seguridad e higiene se pueden atribuir a factores organizacionales como la cultura de trabajo, el estilo de gerencia y el ambiente laboral. Debido a que la mayoría de los accidentes laborales tienen un elemento comportamental, la responsabilidad gerencial cumple un papel esencial en su prevención.